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Si eres de las mujeres que ha dado pecho dio o ha dado pecho a su bebé, es muy probable que entiendas este sentimiento de unión entre los dos. Sin embargo, amamantar no es una tarea fácil. Por ello, y para que puedas disfrutar tanto tú como el bebé de ese momento, es importante hacerlo en el lugar idóneo, como en un sillón de lactancia.
La comodidad y confort a la hora de amamantar son muy importantes, todo eso te lo da un sillón de lactancia. Sus múltiples ventajas han hecho de este artículo de puericultura uno de los más utilizados y preferidos por las madres en la actualidad. ¿Todavía no los conoces? Hoy te damos una pequeña guía donde te diremos todo sobre ellos.
Lo más importante
- Los sillones de lactancia nos brindan un espacio ideal para poder amamantar sin problema a nuestro bebé, pues todas sabemos que no es una tarea fácil.
- Estos sillones de lactancia proporcionan grandes beneficios que abundaremos más adelante.
- Cuando vayas a elegir tu sillón de lactancia busca aquel que cubra tus necesidades, y que cubra ciertos factores como la comodidad, tamaño y materiales. De este modo será una compra correcta.
Ranking: Los mejores sillones de lactancia del mercado en México
Guía de compras: Lo que debes saber sobre el sillón de lactancia
Este es un artículo de puericultura que ha acompañado a las mujeres que lactan y a sus bebés durante los primeros meses de crianza. Sin embargo, en la actualidad, todavía son muchas las personas que no conocen en profundidad los beneficios de su uso. Por ello, respondemos a las preguntas más frecuentes sobre este tipo de sillones.
¿Qué es un sillón de lactancia y qué ventajas tiene?
- El diseño del sillón hace que la madre tenga la espalda recta mientras amamanta al bebé, lo que reduce el dolor de espalda.
- Reduce la sensación de brazos cansados y ayuda a la circulación gracias al balanceo.
- Favorecen a aliviar el estrés y dan comodidad.
- El movimiento mecedor puede favorecer la producción de leche materna.
- El movimiento puede calmar los síntomas de los cólicos, que afecta al bebé.
- El balanceo también induce la relajación y el sueño del bebé.
Es evidente la gran cantidad de beneficios que nos puede aportar un sillón de lactancia, es por eso que se convierte es un producto favorito de muchas madres. Además, podemos encontrar diseños muy diferentes y coloridos, de manera que escojamos el que más se adapta a nuestros gustos y necesidades.
¿Qué tipos de sillón de lactancia existen?
- Sillón de lactancia tradicional: Es el típico sillón de abuelita, pues tiene mecedora. Son muy cómodos y esponjosos, tienen un balanceo relajante tanto para el bebé como para ti a la hora de dar pecho.
- Sillón de lactancia de diseño: Son aquellos que tienen diseños y formas muy distintas, aptas para hacer juego con cualquier habitación. Por supuesto, cuentan con las mismas prestaciones que las tradicionales.
- Sillón de lactancia doble: Se podría decir que son los más novedosos. Cuentan con dos asientos, de manera que ambas pueden estar presentes y mejorar el vínculo con el bebé.
Cabe decir que dentro de esta “clasificación” también pueden variar los diseños, lo que permite que nos sintamos completamente a gusto en nuestro sillón de lactancia. Este es, pues, el principal aspecto que debemos valorar. No olvidemos que se trata de crear un espacio cómodo para disfrutar de un momento tan especial.
(Fuente: Katarzyna Białasiewicz: 114878925/ 123rf.com)
¿Cómo debe ser un sillón de lactancia ideal?
- Siempre debe ser cómodo, pues pasaremos mucho tiempo sentadas en él.
- Mecerse con gran facilidad posible. En ese momento es para descansar como para tener que dedicar un esfuerzo extra al movimiento.
- Altura suficiente. Su altura te debe permitir el levantarte sin problema, aunque llevemos al bebé en brazos. Lo mismo ocurre con la profundidad del asiento.
- Debe ser ajustable y reclinable.
- Tener apoyabrazos, ya que, además de mejorar la postura de agarre del bebé, ayudan a liberar la tensión y reducir el dolor y el cansancio.
- Es recomendable que tenga reposapiés para reducir la presión de la espalda.
- Fácil de limpiar, ya que es muy probable que lo manchemos.
Pues bien, a simple vista pueden parecer muchos puntos, pero es muy necesario que reúna la mayoría de ellos para contar con el mejor sillón de lactancia. Cuantos más cumpla, más práctica y útil será el sillón. Además, recuerda que tu comodidad es lo primero, así que busca siempre el que se adapte a ella.
¿Dónde debo colocar el sillón de lactancia?
Para ser más prácticas, se recomienda ubicar el sillón de lactancia en el dormitorio del bebé, es decir, en la estancia en la que el pequeño dormirá después. Este simple hecho ayuda a que nuestro hijo no se desoriente, lo que favorece su relajación y descanso. Podemos escuchar la opinión de Ana Postigo, especialista en este tema, en el siguiente video:
¿Es importante el color del sillón de lactancia?
Es muy probable que encuentres sillones con diseños muy versátiles, pero la mayoría de ellos son de color blanco o de tonos claros. Este tipo de tonalidades favorecen la relajación e inspiran calma. Todo ello es muy útil y nos ayudará también a conseguir que nuestro bebé duerma plácidamente después de comer.
¿En qué posturas puedo amamantar a mi bebé en un sillón de lactancia?
Postura | ¿Cuándo? | ¿Cómo? |
---|---|---|
Cruzado | En un primer momento. | Siéntate y coloca al bebé sobre ti, de manera que sus vientres queden de frente. |
Acunar | Después de los dos primeros meses. | Apoya al bebé en el brazo del que estés dando el pecho. Realiza movimientos lentos. |
Posición lateral | Ideal para por las noches, tanto en el sillón como en la cama. | Extiende el brazo y apoya al bebé encima, con el brazo sostienes su cuerpo y con la mano su cabeza. |
Pelota de rugby | Si tienes los pechos muy grandes o después de una cesárea. | El bebé se apoya longitudinalmente sobre almohadas. |
Te recordamos que estas solo son algunas posturas, las cuales pueden ser muy cómodas tanto para la madre como para el bebé. Puedes probarlas y ver cuál es la que mejor se adapta a ti. Algunas madres utilizan diferentes posiciones dependiendo del momento del día o del estado de ánimo del pequeño.
¿Con qué artículos puedo complementar el sillón de lactancia?
- Bolsa mural: Casi igual como cualquier bolsa, pero se coloca en el brazo del sillón, en ella podrás tener a la mano todo lo que necesitas mientras le das pecho a tu bebé.
- Cojín para amamantar: Están hechos para ayudar a amamantar, crean la forma perfecta para sostener la cabeza del bebé en la posición correcta.
Recuerda, el uso de cualquier accesorio que te haga sentir cómoda a la hora de amamantar es perfecto. En muchas ocasiones, podemos descubrir nuevos complementos hablando con amigas que ya los hayan utilizado o con los especialistas. En ese momento se trata de disfrutar, así que no debemos escatimar.
¿Algún consejo para utilizar el sillón de lactancia?
- Es primordial que los dos se sientan cómodos. Antes de amamantar, calma al bebé en un lugar cómodo y conocido por ambos.
- Debes acercar de un poco el pezón a la boca del bebé. Cuando él note el pezón cerca, él mismo abrirá la boca.
- Una vez que haya abierto la boca coloca el pezón apuntando a su paladar y pueda succionar con facilidad.
- Busca que la cabeza, orejas y hombros estén alineados para mayor comodidad.
Es normal que en un inicio sea difícil el amamantar, no te preocupes si a pesar de seguir estos pasos no hay éxito. No todos los bebés son capaces de tomar el pecho o necesitan un tiempo de adaptación mayor. Puedes consultar con tu pediatra de confianza para que te dé unas indicaciones más particulares y específicas para ti.
Criterios de compra
Es evidente que es muy importante el elegir a conciencia el sillón de lactancia, ya que en él vamos a pasar buena parte del día. No es de extrañar que debamos valorar ciertos aspectos fundamentales antes de elegir el que nos llevaremos a casa. Por ello, nos gustaría exponer a continuación los principales criterios de compra de este tipo de sillones.
Tamaño
Este criterio es muy importante, porque el tamaño nos indica el lugar en donde los podremos ubicar, elegir el entorno que resulte idóneo para poder amamantar con libre comodidad a tu bebé. Por ello, resulta fundamental que contemos con espacio suficiente para ubicarlo, es por eso que el tamaño es lo primero que debemos valorar.
También, el tamaño nos podrá informar de la profundidad que tiene el asiento, la altura del respaldo y lo alto del asiento. Todas estas dimensiones son las que harán que el sillón resulte más o menos cómodo para nosotras. Recuerda que debes poder levantarte sin necesidad de utilizar las manos.
Materiales
No vamos a negar que este criterio es fundamental, ya que el material con que está hecho el sillón de lactancia determinará si se concluye o no la compra. Los materiales que más se utilizan son la madera y el metal. Por un lado, la madera es consistente, muy duradera y crea unos diseños muy bonitos que quedan genial en cualquier habitación.
Ahora bien, el material metal puede crear sillones más livianos y ergonómicos. Por ello, es otro de los materiales preferidos para este tipo de artículos. La elección entre uno u otro depende únicamente de nuestros gustos o preferencias, ya que cada uno de ellos aporta diferentes beneficios.
Comodidad
Pues bien, ya hemos revisado la estructura del sillón, ahora vamos con su interior, o sea, su comodidad. No hemos parado de repetir que el objetivo principal de este artículo de puericultura es crear un espacio cómodo en el que madre e hijo puedan compartir un momento tan especial, así que, es evidente su importancia.
Siempre elige un sillón de lactancia que te sea cómodo, que tenga acolchonado en su interior y en el que no sea incomodo el estar sentado por largo tiempo. Además, en este sentido también debemos mencionar los apoyabrazos y los reposapiés, dos elementos fundamentales en lo que a comodidad se refiere.
Portabilidad
Este criterio nos referimos a que sea posible el mover de lugar el sillón de lactancia a diferentes lugares de la casa o, por ejemplo, sacarlo a la terraza ahora que ha llegado el buen tiempo. Lo cierto es que, como la ubicación es tan importante, hay quien prefiere tener dos sillones diferentes.
Como lo dijimos antes, es necesario que haya un sillón de lactancia en el cuarto del bebé, el cual será el de uso habitual. Por el otro, una butaca más ligera y generalmente más pequeña, que será la que movamos a diferentes zonas según las necesidades de cada momento.
Lo importante es tener la libertad de poder amamantar donde nos apetezca.
Diseño y color
Este criterio, tal vez, sea el que mejor define si se va a concluir o no la compra. Anteriormente mencionábamos la influencia de los colores en nuestro estado de ánimo y, sobre todo, en el del bebé. Esta es la razón principal por la que debemos tener en cuenta este aspecto antes de realizar la compra.
Algunos de los colores que más se utilizan en los sillones de lactancia son el color blanco y tonos claros. Aunque puedan resultar algo más sucios, transmiten mucha calma y favorecen la relajación del bebé. Respecto al diseño, lo ideal es evitar dibujos estridentes o demasiado recargados, ya que desvían la atención.
Resumen
Los sillones de lactancia son de gran ayuda para aquellas mujeres que han decidido amamantar a su bebé. Con esa actividad se crea un vínculo muy especial que no debería entorpecerse por encontrarnos en un entorno que no fuera del todo confortable. Por ello, este tipo de artículos son tan beneficiosos.
El contar con un sillón de lactancia beneficia tanto a la mamá como al bebé, ya que los hace tener un momento de comodidad y disfrutan al máximo su conexión. Además, aportan ventajas como la reducción de los dolores de espalda o de brazos tan comunes en estos casos. ¿Todavía no los has probado? No esperes más.
Nos ha encantado hablarte del tema de hoy, comparte en tus redes este artículo y déjanos un comentario. ¡Hasta la próxima!
(Fuente de la imagen destacada: Katarzyna Białasiewicz: 111120148/ 123rf.com)